domingo, 10 de febrero de 2013

Hoy converso con... Francisco Javier Perez Carmona.


Hoy Converso con Francisco Javier Perez Carmona.

Hoy, inauguro definitivamente esta sección de la que os hablé, con el primer contertulio que ha accedido gratamente a ayudarme en mi cometido. Y la verdad, no he podido desear mejor inicio para esta sección ya que la conversación se desarrollo de forma muy afable y liviana. Fue un rato digno de repetirse.


Lo primero, supongo, es presentar la figura de mi amigo, si no no tendrá sentido para quienes no le conozcan. Fran, es quizás uno de los amigos que más presente haya estado en una de las etapas más importantes de mi vida, la adolescencia. De principio a fin. Es una figura curiosa. Siempre ha tenido una gran fuerza interior, pero casi nunca la ha manifestado quizás, por su política de neutralidad. Siempre ha sido muy reservado en cuanto a lo personal se refiere y siempre que ha podido, ha evitado mojarse. En su cabeza tiene un mundo enorme que rara vez podemos ver. Y se ha caracterizado normalmente por ser bastante inseguro y dubitativo, pero ya no. Eso fue de lo que más me sorprendió de nuestra charla. El es de un perfil clarisimo de eneatipo 4, o eso pienso yo – quizás deba pedirle que realice el test - pero ahora muestra estar más sano que nunca.

Así que, yendo al grano, le llamé, le comenté la idea y le pareció genial. Así que acordamos un día, un sitio y una hora y quedamos para charlar y tomar un café. En principio el pensó que se trataba de una especie de entrevista pero lo cierto es que no era nada de eso. La charla transcurrió de la forma más normal, hablando como en mente tenía, sobre todo un poco.

De camino hacia la cafetería, hablamos sobre banalidades y nos informamos de lo más relevante de nuestro día. Al llegar al sitio y estar ya acomodados y con nuestras bebidas, sucedió lo primero que inició nuestro primer punto de reflexión. Mi teléfono móvil automáticamente conectó con el wifi de la zona y recibí un mensaje de Whatsapp. Entonces le comenté que pasaba de mirarlo que ahora mismo lo importante era la charla. El coincidió conmigo y como otras veces, me manifestó su opinión al respecto. Yo ya la conocía, pero esta vez fue más completa.

Ambos somos usuarios de Smartphones y de sus más extendidas aplicaciones, por diversas circunstancias personales. Y aun así, seguimos sin cambiar de parecer sobre todo ello. Tal y como el me dijo, veía que eran herramientas que se volvía en nuestra contra, nos hacían más maníacos del control, suprimían nuestra libertad dando una falsa sensación de lo contrario y nos absorbían en un mundo irreal, el mundo de la tarifa de datos, aislándonos del mundo más real y tangible. Yo me mostré de acuerdo con su postura y puntualicé, que era una herramienta supuestamente social, que paradójicamente nos sumía en un mayor individualismo y provocaba que nos socializáramos menos. Me ejemplificó con millones de situaciones absurdas, que bien reconozco similares en mi vida, de estas que se dan con colegas, parejas y familiares.

Cambiamos de tema en el momento en el que le manifesté mi sorpresa ante su trabajado discurso y su excelente criterio. Que me daba la impresión de tener más claro sus objetivos en la vida. Así que le pregunté por sus planes de futuro. El cursa ahora mismo, por segundo año consecutivo, el segundo año de un modulo relacionado con la informática. Y lo cierto es que quiere quitárselo de encima porque no tiene vocación por ello, solo lo escogió para no estar sin hacer algo hasta que se decidía que hacer con su vida. Y sus planes a corto plazo van enfocados en zanjarlo rápidamente. También me comentó que lo que quería hacer con su vida, era dibujar, que es la pasión que siempre le había llenado y que era consciente de que no iba a darle mucho dinero o ninguno, pero prefería luchar por su sueño a vivir amarrado en un trabajo que no le llenase personalmente. No me sorprendió demasiado porque conocía de su pasión, pero me fue grato oír de su boca que había tomado la determinación de echarle valor y hacer lo que realmente quería. Además me dijo que querría especializarse sobre todo en hacer tatuajes. Muchos le habían dicho que de ese trabajo no se vivía y que pocos llegaban a algo. Pero a él eso no le desanimaba en absoluto. El les contesta siempre lo mismo, que será de esos pocos y que con el tiempo lo demostrará.

Yo no podía más que aplaudirle por todo lo que estaba oyendo. Así que decidí señalar hacia sus cadenas, ahora rotas, para que el mismo me demostrase que se había liberado de ellas. Le hice plantearse porque había sido entonces tan dubitativo y porque había tenido siempre tanto miedo. El me contestó que por miedo a fracasar y a que le señalasen con el dedo en el intento de destacar en algo. Que por ello siempre había sido muy pasivo y se había dejado influenciar y llevar por los demás demasiado. Que el miraba a su yo pasado, y le daba lastima y asco a veces por lo “chupa culos” que alguna vez había sido para evitar conflictos, para eludir responsabilidades. El ya no quiere caer mas en la falsa honestidad por una diplomacia oportunista. El ahora desea ser lo que es y sentirse aceptado. Y que nada, ni sus figuras paternas, ni sus amigos o conocidos, por importantes que sean o no en su vida, van a limitarlo. El ahora sabe que así agradará a menos gente, pero se ganará a más personas que de verdad merezcan la pena.

Con todo esto, Fran me estaba aportando más de lo que en un principio esperé. Me estaba ayudando no solo a ver lo mucho que había madurado y lo fuerte que se había hecho, no solo a confirmar lo que yo pensaba de que en su silencioso observar se nutria de todo lo que los demás hacíamos, si no que me ayudó a reafirmarme en ideas que yo ya no tenía tan claras pero siempre habían regido mi ética. Fue como ya digo, una charla muy gratificante.

La charla siguió girando entorno a estos temas y más ejemplificando con más experiencias. Derivamos a las distintas bifurcaciones que el contexto del que hablábamos nos permitían, reafirmando nuestras posturas y haciendo gala de nuestros valores morales, de en que coincidíamos más y en que menos y cayendo en analizar hechos pasados que compartimos, como suele pasar en estas charlas entre dos o más amigos. Nos encontramos también en el lugar con una pareja, amigos comunes, que se sumaron a nuestro debate. Estuvo realmente completo.

También tocamos temas más personales como el amor y cosas de esas. Pero ambos coincidimos en que asuntos así, es mejor dejarlo en la intimidad de cada uno. Solo me dijo que pusiese que como en todas las demás cosas de esta vida, ahora y con más perspectiva sobre los hechos pasados, era consciente de muchas cosas que pasó por alto, errores que aunque no fueran intencionados o demasiado graves, sabe que tendría que haber actuado de otra forma. Y esa es la vida. Los errores que comentemos, es muy importante tratar de verlos para no volver a caer en ellos.
Nos extendimos hablando mucho más de lo que en un principio nos habíamos propuesto y cuando caímos en la hora que era, zanjamos el asunto para seguir con nuestros menesteres.

Ahora, como le prometí, pondré un link a su DevianArt, para que podáis ver algunos de sus maravillosos dibujos, mejorables siempre, como el recalca tanto. Otros los cataloga el mismo de basura, pero que le ayudan a mejorar en su objetivo, y lo ponen cada vez más cerca en cumplir su sueño. Los dibujos podéis verlos AQUÍ. Espero de veras que todos sepáis sacar de esto, conclusiones útiles para vuestras vidas. Al fin y al cabo ese es el objetivo de esta sección, tanto para mi como para todo el que pueda leer esto. Un saludo.

Otro ladrillo al muro.



No hay comentarios:

Publicar un comentario